CARACTERISTICAS DE LA ORALIDAD
SAMUEL JAIMES ALVARADO
PRIMER SEMESTRE PSICOLOGIA
90003_1376
La oralidad es en esencia un proceso natural propio del hombre, que nace
a partir de la interacción social, habilidad adquirida desde niños que permite
una comunicación efectiva entre las personas. De la misma forma el lenguaje
oral crece con el individuo, a medida que se enriquece le proporciona identidad, le permite moverse entre espacios
educativos, sociales y emocionales.
En muchas partes del mundo, la escritura es
apenas un sistema secundario o inexistente, donde toda la información sobre
estos grupos se ha transmitido verbalmente de una generación a otra.
Otra característica importante es que la
oralidad puede existir sin la escritura, comunicando verbalmente ideas,
imágenes, situaciones, personas, apoyándose con los sonidos propios del habla,
expresiones corporales e incluso instrumentos, los cuales se transformarían en
expresiones musicales que acompañarían los rituales tribales.
Durante sus primeros años de vida, el niño
interactúa con sus padres por medio de señales sonoras, expresiones corporales
y gestos faciales que aprende a reconocer y a integrar dentro de su sistema
primario de comunicación, siendo el más importante el de los sonidos. Este
proceso se afianza y se perfecciona a medida que el niño alcanza su madurez
cognoscitiva y su interacción con las demás personas logrando de esta manera
participar en situaciones familiares,
escolares, eventos. Una vez se estructura y se especializa, se convierte en un
sistema natural de comunicación.
La comunicación oral se compone de elementos
inherentes al sonido, y sus unidades se dividen en unidades abstractas llamadas
fonemas, por ejemplo: la palabra casa se
divide en cuatro fonemas k/a/s/a, A esta misma palabra también corresponden en
el habla, acto concreto,
cuatro sonidos, a los que la fonología denominará alófonos , y estos últimos
pueden variar según el sujeto que lo pronuncie. La distinción fundamental de
los conceptos fonema y alófono, está en que el primero es una huella psíquica
de la neutralización del segundo que se efectúan en el habla.
Dentro de las características primordiales de
la oralidad está la suprasegmentalidad, la cual se basa en la entonación, el
acento y el ritmo que se le dan a las palabras, oraciones y narraciones. También
se refiere a las variaciones de vibración de las cuerdas vocales, esta frecuencia se
ajusta mediante la tensión muscular que se aplica a las cuerdas vocales. Así un
hablante controla la entonación aplicando mayor o menor tensión a las cuerdas
vocálicas, lo cual le permite enfatizar más unas partes de la oración u otras o
darle un contorno de sorpresa o de interrogación mediante la tensión muscular.
La velocidad de percepción de la comunicación
oral varía de acuerdo a la habilidad del hablante, siendo más veloz el texto
escrito. Sin embargo, en la oralidad está presente el origen de la información
a través de quien emite el discurso, y en el texto escrito se desconoce su
origen.
Para el almacenamiento de la información, la
oralidad se vale de recursos para su preservación y permanencia como lo son los mnemotécnicos, la cual es una
técnica o procedimiento de asociación
mental de ideas, esquemas, ejercicios sistemáticos, repeticiones, entre otros para
facilitar el recuerdo de algo.
La oralidad es la forma de comunicación más natural, elemental y
original del lenguaje humano, puesto que existe por sí misma y no necesita de
complementos para expresar con claridad el mensaje, característica que la
diferencia de la escritura, la
cual no se habría originado sin expresión oral.
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